domingo, 15 de septiembre de 2013

CLAVADO EN LA CRUZ DE ESE MADERO









CLAVADO EN LA CRUZ DE ESE MADERO





Al verte mi Dios y padre de los cielos
clavado en la cruz de ese madero.
Me siento mi señor por ti morir
tú sabes del sentir por ti sincero.
Los pasos qué camino tras de ti.

Mis días se me hacen largas metas
tantas veces imposibles de seguir.
Me pones mi señor espinas sin respuestas.
qué me cuestan tanto esfuerzo de vivir.

Me duelen los brazos del esfuerzo
el alma del dolor que tanto apena.
El corazón lo pongo en cada rezo.
y mis pasos son senderos en condena.

Si pudiera mi Dios aminorar el llanto
y apagar el dolor de mis entrañas.
El vivir sin sufrir este quebranto
por los hechos que lastiman en mi alma.

Por los hombres padecí tanta tristeza,
y con calma acepte en resignación.
Aunque en mis largas horas de bajeza
yo quisiera poder conocer la indignación.

Pero me creaste de eta forma tan inusual
qué el perdón me dejaste en cada hecho.
Soportando esta triste amargura sin final,
como siembra que no crece en el barbecho.

Pero ven mi Dios hasta mi puerta, entra en mi vida
y ampárame en mis horas de tristeza sin final,
cuando busco a mi buen hijo ya sin vida.
Y a ese otro que camino sin saber dónde estará.

Qué me faltan las fuerzas en mi lucha sin salida.
Y aun transito ayudando sin pensar en nada más.
Soportando las heridas tan amargas de la vida.
Si quisieras mi Dios con tu mano el aliviar mi penar.

Qué me faltan las fuerzas tan precisas para continuar
y seguir esta senda en un mundo tan necesaria.
Donde el hombre necesita reafirmar que se ha de amar,
donde tu palabra la reparto y comparto sin medida,
en un mundo que vive entre desgracias de la caridad.

Pero ven mi Dios necesito saber y sentir de tu presencia
entender que existo en este mundo tan lejano del amar.
Donde el hombre se viste de falsa y egoísta hipocresía.
Y se olvidan de que tu por ellos. En una cruz de madera estas.

Dame fuerzas mi Dios las necesito, para continuar.
y seguir la senda por tus manos, para mis días decidida
más sabes en esta lucha preciso mi Dios de tu amparar.
ven espero encontrarte y de tu mano. Poder el ayudar.



Autor -@-Francis Falcón






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Días de dudas y sombras








Días de dudas y sombras



Días que al paso del tiempo
sombras en la tarde ocultas.
Entre verdades a destiempo.
Y las palabras que sepultas.

Llevas el alma en quebranto
de los hechos no vividos,
y las palabras entretanto.
Describiendo los sentidos.

Entre mentiras y verdades
dejar transitar tú espacio,
tan repleto de realidades
como la sombra de ocaso.

Y no sabes dónde estas
ni tampoco donde habitas,
y no sabes dónde vas,
ni el saberlo necesitas.

Te preguntas sin demora
que será de un día, el mañana.
Cuando la fría ventana
sea tu verdad traidora.

Porque no hay luna, ni sol
ni edad que el tiempo detenga.
Que todo pierde su esplendor
cuando la juventud se aleja.

Y en ese día ya hoy cercano
donde tu edad tome vida,
con la fría vejez de la mano
y sea una llama prendida.

No busques entre los dioses
lo que el mundo te ha robado,
búscalo entre los mil roces
qué la vida te ha regalado.

Y cuando sus nombres implores
a quien desde lo alto te miran.
Sé paciente nunca llores.
Ellos desde allí te cuidan.

No sabrás ni como, ni donde
quién en esos mundos camina.
El que lleva puesto otro nombre
al que tú le distes la vida.

Las que quedan tras tus pasos
las semillas de tus andares,
son emblemas sin fracasos
del amor, que tomaron de los padres.

Te quieren, aunque lo callen
y en silencio también te necesitan.
Ser esa mano que en tu talle,
se forjo en agua bendita.

Más no dejes como empeño
el poder lograr lo no logrado,
vive solo y sin desdeño
y confía en tu Dios amado.

Y cuando sientas que tus pasos
te encaminan sobre senda perdida,
no te me aferres al fracaso
ellas son toda tu esencia y vida.

No busques lo no encontrado
tan solo Dios podrá traerte.
Todo cuanto te han robado
de la semilla de tu vientre.

Pero ellos no están perdidos
habitan dentro de tus entrañas.
Solo Dios entenderá los sentidos
De tanta pena que arañas.

Los perdidos somos nosotros
Cuando en silencio buscamos
y entre lobregueces caminamos
Dañándonos unos a otros.

Si allanaras la tierra con tus manos
buscando las verdades ocultas
sabrías que todo SER humano
tiene la salvación sin preguntas.




AUTOR-@- Francis Falcón..
Diseño- F. Falcón.